martes, 25 de agosto de 2009

Empatía vs Adulación

La empatía consiste en "calzarse los zapatos de otro"
La empatía se cita como uno de los pilares de la Inteligencia Emocional (aquella inteligencia que nos asegura una vida sobresaliente) además de las habilidades sociales y el autocontrol de las emociones propias. Una persona se puede considerar empática cuando sabe ponerse en la piel del otro. Existen varios aspectos que definen nuestro nivel de empatía tales como la interpretación del leguaje no verbal, la intuición o la comprensión. Así pues, la empatía consigue acercarnos a nuestro interlocutor, conociendo vehemente sus preocupaciones, inquietudes, miedos, preferencias,... actuales.

miércoles, 12 de agosto de 2009

¿Amor Incondicional o Miedo a la Soledad?



Tras la cuestión que expuse ayer, hoy me asalta otra pregunta: ¿qué buscamos en una relación de pareja?

Hay quien dice que es un "lobo solitario" y que no soporta la presión de someterse al apretado lazo de la vida en pareja. Sin embargo, también es cierto que hay gente que afirma esto, a pesar de no ser cierto. Me explico, hay personas que buscan a su príncipe azul o su princesa dorada y como no lo encuentran, se resguardan en la sombra de la soledad, aludiendo que su felicidad se halla en el aislamiento y la autosuficiencia.

Mi gran "amigo" Punset, diría que estos "lobos solitarios" están equivocados, puesto que si existe un detonante para penetrar de lleno en el universo de la felicidad, éste lo conformarían las relaciones sociales.

Llegados a este punto, se me antoja una paradoja: Una vida en pareja donde los amantes comparten cada suspiro (de modo que pueden llegar a axfisiarse) frente a una soltería repleta de amistades y ligues. Es decir, la concentración de nuestras relaciones sociales en una única persona, frente a muchas relaciones con nexos menos fortificados.

jueves, 6 de agosto de 2009

El matrimonio: ¿Signo de amor o de simbiosis?

La creencia popular de que el sacramento del matrimonio es el cénit del amor es bien conocida por todos. No hace mucho tiempo atrás, formar una familia o tan sólo vivir en pareja era mal visto en nuestro país, si no se había pasado por el altar previamente.

Lejos de temas religiosos, quiero centrarme en el matrimonio como el vínculo afectivo y cooperativo de sus dos congéneres. ¿Realmente el matrimonio es la expresión máxima del amor entre dos personas? O tal vez, ¿se trata de una formalización de la cooperación e implicación de ambas partes para el bien común? Si se asemejara más a esta segunda opción, tendría un punto de vista más lejano del amor romántico y más afín a lo que se describe en la naturaleza como “simbiosis”.